Sumándose a la riquísima tradición de los bestiarios medievales, Miguel Torga nos propone en los catorce relatos que integran Bichos una reflexión sobre la condición humana y nuestro sitio en el mundo.
Partiendo, como es frecuente en él, de los mitos agrarios y pastoriles enraizados en las duras tierras portuguesas de Trás-os-Montes, Torga sólo utiliza la anécdota para acercarse mejor a lo esencial: lo que importa en estas pequeñas disecciones de la grandeza y miseria del alma humana es lo que nos llega a lo más hondo, lo que nos identifica a los hombres, más allá de nuestras diferencias individuales. Pero Torga, gran patriarca de las letras portuguesas, ha sido siempre un humanista. Estos «Bichos» que protagonizan sus relatos son imágenes retocadas de nosotros mismos y resultan, en fin de cuentas, vulnerables y humanos, conmovedores y complejos.
Miguel Torga. Seudónimo de Adolfo Correia da Rocha, (São Martinho de Anta, 1907 — Coímbra 1995). Se dio a conocer como escritor a partir de 1927 con sus colaboraciones en la revista Presença.
Hijo de una familia humilde pudo terminar sus estudios de Medicina donde se licenció en la Universidad de Coimbra en 1937.
Cultivó el ensayo y el teatro y publicó numerosos libros en verso y en prosa, entre los que destacan:
La creación del mundo (Alfaguara, 1986), Cuentos de la montaña (Alfaguara, 1987), Piedras labradas (Alfaguara, 1988), Rúa (Alfaguara, 1994), Bichos (Alfaguara, 1998), El señor Ventura (Alfaguara, 2005), Diario (1932-1987) (Alfaguara, 1988) y Diario (1987-1993) (Alfaguara, 1997). En 1989 obtuvo el prestigioso Premio Camões.
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